Los monos nocturnos (Aotus) son un género de los primates, pertenecen a la familia Aoitdae y se distribuyen a lo largo de los bosques tropicales desde el norte de Argentina hasta el sur de Panamá. Como bien señala su nombre, esta especie se mantiene activa durante las noches.
Según el estudio Desapareciendo en la noche: Una revisión al tráfico de monos nocturnos y su legislación en América del Sur y América Central publicado el 18 de enero del presente año en la revista de primatología Folia Primatológica, el mono nocturno se encuentra presente en nueve países: Argentina, Paraguay, Bolivia, Brasil, Ecuador, Colombia, Venezuela, Panamá y Perú.
Las especies más comercializadas son el mono nocturno de Nancy Ma (Aotus nancymaae), presente en Perú, Colombia y Brasil; el mico nocturno gritón (A. Vociferans), localizado en Brasil, Colombia, Ecuador y Perú; y el mico nocturno panameño o mico nocturno chocoano (A. Zonalis), presente en Colombia y Panamá.
En la lista Roja de Especies Amenazadas, se establece que el mono nocturno -un primate del bosque amazónico- evidencia un deterioro en su estado de conservación, lo que se atribuye al comercio ilegal de animales.
La transformación del hábitat de este animal con fines agrícolas, particularmente a terrenos dedicados al cultivo de arroz, aceite de palma, soya y pastos, también lo está afectando, según la organización.
En Perú, Colombia y Brasil, el mono nocturno es utilizado en la investigación de la malaria.
En el departamento de Amazona se presenta una situación que significa una amenaza a la conservación de la biodiversidad de la fauna amazónica, pues la obtención de permisos y licencias para la experimentación científica aparentemente ha cometido delitos de conservación ambiental, a la vez que ha puesto en duda su actuar ético.
Actualmente, se está en proceso de investigar denuncias de tres actividades que tienen característica de delito que ha generado un desequilibrio ambiental a partir de las poblaciones de monos nocturnos y, por lo tanto una una disminución en la existencia de la especie.
En primer lugar, se están haciendo pagos para la captura de monos nocturnos, lo cual va en contra de la ley, según el decreto 309 del 2000.
En segundo lugar, captura de estos animales se ha hecho de forma masiva y contraria a los protocolos técnico-ambientales establecidos para tal efecto.
Y por último, y tal vez la más importante, se ha adelantado experimentación ilegal con los ejemplares de la especie Aotus nancymaae y Aotus vociferans, conocido como monos nocturnos o musmuqui, especies de primates que son nativos de la selva amazónica peruana y brasileña, los cuales son introducidos en el territorio colombiano, constituyendo así transplante e introducción de fauna silvestre.
Gracias a las continuas liberaciones de primates de esta especie, provenientes de Perú y Brasil, ya se encuentra en territorio colombiano. Vale la pena mencionar que la especie en mención está clasificada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) en estado vulnerable (https://www.iucnredlist.org/details/41540/0 ), indicando así que la especie se está enfrentando a un riesgo de extinción alto en estado silvestre.
De igual forma es necesario mencionar que la gran destrucción generada en los bosques amazónicos afecta la regulación del clima global, por lo cual es responsabilidad del Estado, velar por su conservación y garantizar que los servicios ecosistémicos que proveen estos bosques se mantengan.
¿Para qué y quiénes los compran?
Los monos nocturnos son bastante parecidos a los humanos debido a las respuestas de sus sistemas inmunológicos frente a enfermedades. Es bastante conocido cómo en Colombia se les exporta para experimentación médica.
La exportación a Colombia se realiza desde hace unos 20 años aproximadamente y es con el fin de experimentar medicinas para la malaria. Sin embargo, hay otras razones que en menor medida contribuyen a su comercio. El consumo de los monos nocturnos en el ámbito local y regional se debe a que se le usa como mascota; a nivel nacional se les traslada a grandes ciudades como Lima o Chiclayo; a nivel internacional, aparte de la experimentación, se le compra como mascota exótica, así es con Inglaterra por ejemplo.
Menciona la doctora Noga Shanee, científica que analizó el caso peruano de los monos. Doctora en Ecología.
Derecho de petición enviado a Corpoamazonia
A continuación anexamos un derecho de petición enviado a Corpoamazonia con su respectiva respuesta, en la que pueden verificar los estudios e informes de la disminución de la especie Aotus y todas sus subespecies en el amazonas, así como las medidas de protección y vigilancia que hay para la reintegración de monos Aotus una vez regresan a sus hábitats naturales.